Enseñar, un viaje en cómic

Un delicioso, ocurrente, transgresor, pícaro y muy riguroso cómic sobre la enseñanza y el aprendizaje escolar. Una forma completamente novedosa de hacerse preguntas y someter a escrutinio facetas de la enseñanza que las rutinas más cotidianas de las aulas, con demasiada frecuencia, hacen que pasen desapercibidas. Y a este fin contribuye el nuevo lenguaje del cómic.
Como subraya en la contracubierta sobre esta obra Laurie Anderson, la gran artista y compositora de rock y música experimental (y esposa de otro de los grandes iconos del rock que murió el pasado mes, Lou Reed): ¡Es divertidísimo, serio y fabuloso! Un manifiesto general que cambiará la vida de muchas personas.
El héroe discreto

AVargas Llosa se le puede considerar tanto como un pensador que escribe a menudo novelas, como un literato de mirada lúcida que de vez en cuando ofrece ensayos. Efectivamente, así ha sucedido tras recibir el autor el Premio Nobel. Primero nos ha ofrecido un ensayo, "La civilización del espectáculo", una estupenda reflexión sobre lo banal de la cultura en nuestros días, o, por mejor decir, la denuncia de que la sociedad busca ante todo el "divertimento" por encima de cualquier otro valor ético o estético.
Y posteriormente una novela, "El héroe discreto", un relato sobre personajes de la vida cotidiana que defienden con entereza sus principios morales.
Efectos secundarios

En la presentación del libro, que tuvo lugar en la Real Academia de Farmacia, pudimos observar la simpatía con que la cúpula directiva de dicho organismo acogía una obra de ficción sobre los diez fármacos más vendidos en nuestro país. Se hizo una loa al medicamento cuyo fin primero es sanar, al menos aliviar el dolor y siempre intentar mantenernos en buena forma.
Es un libro original, ingenioso y tierno sobre personas que sufren enfermedades muy crueles y, junto con los fármacos, lo que más ayuda son las relaciones que la enfermedad genera, bien sea con los familiares y amigos más cercanos, bien con el médico o con el propio farmacéutico –siempre dispuesto a escuchar y orientar–.
Las parábolas de Jesús

Rolando Camozzi es un sacerdote oriundo de San Luis del Palmar de la provincia argentina de Corrientes que reside en Madrid donde trabaja como escritor y crítico literario además de las tareas propias del sacerdocio. No se considera un especialista, sino un "cristiano en búsqueda, que intenta comprender su fe".
El hombre que plantaba árboles

Jean Giono en esta pequeña joya literaria nos presenta en forma de parábola una propuesta ética para cambiar el mundo. Y esta utópica finalidad, nos aclara, sólo se consigue intentando cambiar el pequeño mundo de nuestro entorno más cercano.
Giono fue un escritor francés, muerto en el año 1970, cuya obra tiene como fondo su Provenza natal, y como inspiración su visión de la Grecia antigua, fruto de sus lecturas clásicas. De ahí su interés por la conducta humana frente a los problemas de la moral y la metafísica.